El queso curado al vino se elabora con leche cruda de oveja. Es afinado con corteza natural y macerado en vino durante 6 meses de curación. Con un interior firme donde destacan las venas de color purpura del vino que se introducen hacia el interior. La textura suave y cremosa, destaca por su sabor y aroma delicado, donde los matices del queso y del vino armonizan sutilmente para conseguir un queso moderno, con un paladar exquisito.
El queso curado artesano se elabora según la forma tradicional con leche cruda de oveja. Se madura durante 6 meses en bodega hasta alcanzar una textura firme, ojalada de color marfil. El lento y a la vez profundo proceso de afinado con corteza natural enmohecida le permite conseguir un intenso y equilibrado sabor en boca. El sabor, aroma y la extraordinaria cremosidad hace de este queso curado un auténtico manjar.
El queso curado en aceite de oliva virgen extra es elaborado con leche cruda de oveja. Tras cuatro meses de maduración en bodega el queso adquiere cremosidad y firmeza. La segunda fase de afinado en maceración provoca la fusión perfecta del queso y el aceite para dar lugar a un excelente producto, de gran intensidad de sabor y aroma.
El queso curado en manteca se elabora artesanalmente con leche cruda de oveja. Se madura durante 6 meses de manera natural y controlada en bodega hasta alcanzar una textura firme y compacta de color marfil. La última fase de Afinado se recubre de manteca de cerdo en la corteza para potenciar al máximo un intenso sabor y aroma, a la vez que se consigue una textura mantecosa.
El queso curado en romero se elabora de forma artesanal con leche cruda de oveja. Durante seis meses el queso madura de manera natural y controlada en bodega alcanzando una textura firme, compacta de color marfil y agradable e intenso sabor en boca. Los dos últimos meses el queso se afina con hojas de romero en la corteza para aportar un aroma floral mediterráneo, que hacen de él un queso sobresaliente.
El queso Gran Reserva se elabora artesanalmente con leche cruda de oveja. Son necesarios 18 meses de maduración y afinado en bodega para lograr conseguir un queso con textura firme laminar de color pajizo-dorado. El largo y lento proceso de afinado permite la exaltación de su potente sabor y aroma. Todo un deleite para los amantes del queso noble y prominente.
El queso tierno mantiene la frescura y ligereza de la leche de oveja. De textura suave y delicada procedente de la cuajada original, Es el queso ideal para combinar en ensaladas y postres.
El queso semicurado artesano, se elabora con leche cruda de oveja de manera tradicional. Se madura durante 3 meses hasta conseguir una textura semifirme de color pálido y prominentes ojos, manteniéndose la frescura, suavidad y cremosidad originales de la leche de oveja. A la vez comienzan a aparecer finamente los primeros matices sensoriales de la fermentación láctica. En 2018 ha sido considerado como 2º mejor queso de oveja de España.
Queso elaborado con leche de oveja (min. 70%) y leche de vaca. Con intenso sabor e iconfundible textura, de color amarillo pálido. Ideal para tomarlo solo, con pan, como aperitivo o combinándolo con las mejores tapas. Su corteza, con manchas de cincho, se presenta en color aceitado.
El queso curado en aceite de Oliva Virgen Extra y macerado a las finas hierbas, es elaborado con leche cruda de oveja. Tras 4 meses de maduración en bodega, el queso adquiere cremosidad y firmeza. La segunda fase de afinado en maceración provoca la fusión perfecta del queso y el aceite para dar lugar a un excelente producto, de gran sabor y aroma.